Aumento de casos de dengue en América Latina resalta la necesidad de un enfoque preventivo

LinkedIn
Twitter
Facebook
WhatsApp
Email
El aumento de los casos se debe a la naturaleza estacional de estas enfermedades, y se teme que las cifras continúen en aumento.

América Latina enfrenta un creciente desafío en la lucha contra las enfermedades transmitidas por mosquitos, especialmente el dengue. A pesar de los esfuerzos de los gobiernos y las organizaciones sanitarias para prevenir y controlar estas enfermedades, los casos continúan multiplicándose debido a la crisis climática y los sistemas sanitarios debilitados tras la pandemia.

El dengue, transmitido principalmente por el mosquito Aedes aegypti, ha experimentado una explosión de casos en las últimas cuatro décadas en la región. En la década de 1980, se reportaron aproximadamente 1.5 millones de casos en las Américas, pero en la última década (2010-2020), se registraron más de trece millones de casos, según datos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).

Sudamérica es la región más afectada por el dengue. De acuerdo con datos publicados por EFE, Brasil ha registrado un aumento significativo de casos, con 864,147 posibles casos y 291 muertes confirmadas en lo que va del año. Argentina, Colombia, Bolivia y Paraguay también enfrentan altas estadísticas.

En Argentina, se han confirmado 56,324 casos de dengue y se han notificado 39 fallecidos hasta mediados de abril. Colombia ha contabilizado más de 28,000 casos en lo que va del año, extendiéndose por los 32 departamentos del país. Bolivia ha registrado 69 fallecidos y 20,998 casos, con la región oriental de Santa Cruz como la más afectada. Paraguay enfrenta una epidemia de chikungunya, con 72,022 diagnósticos confirmados y 2,245 casos de dengue.

El aumento de casos en estos países se debe a la naturaleza estacional de estas enfermedades, y se teme que las cifras continúen en aumento debido a los patrones climáticos extremos. La propagación y la incidencia de estas enfermedades pueden verse influenciadas por los cambios climáticos.

Mientras tanto, en Centroamérica, no hay preocupaciones significativas por la incidencia del dengue y el chikungunya hasta el momento. Costa Rica, Panamá, Guatemala y Honduras han reportado un número relativamente bajo de casos confirmados. Sin embargo, a medida que avanza el año, es necesario mantener la vigilancia y la prevención.

Durante la pandemia del COVID-19, los recursos destinados a la prevención, el monitoreo y el tratamiento de estas enfermedades se vieron reducidos en muchos países de la región, ya que los sistemas de salud se enfocaron en la respuesta al virus. A pesar de las restricciones y la disminución de recursos, se registraron más de dos millones de casos de dengue y otras enfermedades transmitidas por mosquitos en la región durante el periodo pandémico.

La situación resalta la importancia de un enfoque preventivo para evitar la propagación del dengue. Aunque las medidas de distanciamiento social y el cierre de espacios limitaron la participación de las comunidades en las actividades de prevención, es fundamental fomentar la conciencia y la acción individual y comunitaria para eliminar los criaderos de mosquitos y reducir el riesgo de contraer enfermedades transmitidas por ellos.

LinkedIn
Twitter
Facebook
WhatsApp
Email

Noticias relacionadas

Translate »