Meet the C-Suite
Harold Forero, Gerente de Desarrollo de Negocios en InDrive.
Con diez años de experiencia, Harold Forero Neira (31 años, Licenciado en Negocios Internacionales por la Universidad del Rosario) actualmente se desempeña como Gerente de Desarrollo de Negocios de inDrive para Sudamérica y República Dominicana. Es responsable en estrategias que impacten al crecimiento del negocio, así como líder en el proceso de lanzamiento en los países a cargo.
Llegó a su actual puesto en plena pandemia, así que sabe cómo es crecer en un entorno desafiante y lleno de incertidumbre. Con más de 150 millones de descargas a nivel global, lo que la posiciona como la segunda aplicación de más rápido desarrollo en su industria, y con presencia en 17 países de la región latina, inDrive está creciendo a un ritmo acelerado que, según él mismo reconoce, pone un desafío extra al momento de planificar a qué nueva locación llegarán. Desde ese ángulo, Harold nos cuenta los orígenes de la iniciativa y como ha ido sorteando los obstáculos para crecer en países de nuestro continente.
- La app nace en Siberia, pero está basada en California y cuenta con presencia en 700 ciudades. Cuéntanos ¿cómo ha sido el meteórico crecimiento de inDrive?
Todo surgió en 2013, a partir de una necesidad de transporte en la ciudad de Yakutsk, Siberia, en donde por las bajas temperaturas, los precios de la gasolina se incrementaron mucho y las personas no encontraban opciones de transporte. Fue entonces que los creadores idearon un espacio en donde conductores independientes pudieran ofrecer sus servicios, y las personas pudieran conectar con ellos de manera directa, de persona a persona, sin intermediarios y sin algoritmos. Por eso ese primer nombre: InDriver, que significa independent driver.
- La aplicación llegó a Latinoamérica apenas cinco años más tarde…
Sí, inicialmente llegamos a México y Centroamérica en 2018; pocos meses más tarde a países de Sudamérica, funcionando bajo la premisa de “necesito ir de un lugar a otro, hago una solicitud poniendo toda la información del punto A al punto B, por lo que ofrezco una tarifa que puedo y me parece justo pagar. Esta filosofía es la esencia y piedra angular de inDrive”. Los conductores interesados ven esa solicitud con toda la información del destino, nombre del usuario, cuántos viajes ha tomado, el precio que propone pagar, y el conductor o conductora puede decidir si lo toma o tal vez quiera contraofertar, pedir un mayor valor. Tal vez se encuentra más cerca, tal vez tiene un mejor vehículo, más nuevo, son muchas las variables que pueden entrar a jugar en ese proceso. Y luego, el usuario toma la elección de con quién quiere irse.
- Parte del leitmotiv de inDrive es combatir la injusticia. ¿Cuál injusticia es esa?
Desde el principio el modelo se pensó así, y se sigue manteniendo con esa filosofía: libertad de elección, trato persona a persona, al fin y al cabo ¿cómo combatir esa injusticia tecnológica de los algoritmos, de información oculta? En inDrive no pasa, es totalmente transparente.
- Tú llegaste con la pandemia a la firma. ¿Fue ese un momento decisivo para inDrive en que empezaron a crecer más, también?
Con el COVID-19 las aplicaciones [de movilidad compartida] comenzaron a crecer aún más. Son cuatro verticales de servicio con las que inDrive cuenta: transporte dentro de la ciudad, envío de paquetes pequeños, envío de paquetes grandes (mejor conocido como Flete), y una cuarta que es para moverse de una ciudad a otra. Estos cuatro funcionan bajo esa misma filosofía, bajo esa misma misión de oferta y contraoferta, un acuerdo entre las dos partes. Esto es poner la plataforma, la herramienta tecnológica al servicio de las personas.
- ¿Y cómo fue visto este modelo, cuando llegaron por primera vez a Latinoamérica? ¿Quizás era extraño respecto de los servicios de movilidad que ya se ofrecían?
Parte de nuestra filosofía es democratizar el acceso a este tipo de herramientas. inDrive llegó inicialmente a ciudades que no necesariamente eran las más grandes de cada país. En Colombia, se llegó primero a Cúcuta, que es una ciudad más pequeña que Bogotá. En Chile, por ejemplo, el lanzamiento de inDrive en Santiago se hizo recién en 2022, pero ya estábamos en otras ciudades que tenían altas necesidades de movilidad y debido a las condiciones culturales y económicas, evaluamos, entendimos ese modelo de negociación y de acuerdo a ello, pasaron a ser más relevantes. Dicho de otra forma, nos dimos cuenta que la cultura latinoamericana, la manera de tratarnos entre nosotros y la cercanía que tenemos como personas, es bastante coherente con la misión de inDrive y hemos encontrado una gran acogida porque precisamente es algo que aplica y que les interesa a todas las personas: poder encontrar tarifas y condiciones justas, transparentes, donde conozca toda la información de entrada y eso no tiene límites, no tiene fronteras.
- Concretamente, ¿cómo funcionan los pagos, tanto para conductor como para pasajero?
InDrive tiene una cuota por servicio de 9,5% del viaje, que se cobra fijo a los conductores. Este es un porcentaje fijo y no va a cambiar cuando se finalice un viaje. Todo está, de nuevo, transparente y claro, las condiciones son estas y en eso nos mantenemos. Respecto al pago que hacen los pasajeros, depende del país. En Chile, por ejemplo, el pago lo hace directamente el usuario al conductor, sin intermediarios, y se hace en efectivo o transferencia bancaria. En Perú está el efectivo, pero también con Yape o Plin, que es una billetera electrónica. En Colombia hay otras billeteras electrónicas, como Nequi.
- ¿Existe un centro de atención al cliente o existe comunicación con choferes para solucionar los problemas que tengan?
Contamos con un chat dentro de la aplicación, en donde el equipo de soporte atiende inquietudes, como es el caso de alguna sugerencia o reporte de objeto olvidado. Asimismo, también se cuenta con el correo electrónico support@indrive.com. Tanto el chat en la aplicación como el correo, están disponibles las 24 horas del día, los 7 días a la semana.
- ¿Cómo es la contratación con los conductores, cómo se valida la identidad? ¿Hay un proceso de onboarding?
Tenemos áreas especializadas en ese proceso de reclutamiento, y dependiendo del país, distintos documentos y requisitos se les piden a los conductores, también hay otro equipo dedicado exclusivamente a revisarlos, para ver que haya cargado una licencia de conducir verdadera del país donde se está registrando. Además, los pasajeros tienen acceso a la información de los conductores, por lo que les da toda la información que necesitan para tomar la elección de un viaje, antes de aceptarlo.
Durante el viaje, contamos con las medidas de seguridad que son estándares que sabemos que funcionan en la industria como la geolocalización, nosotros podemos hacer seguimiento a los viajes en tiempo real y tú como pasajera o pasajero, o como conductora o conductor, pueden compartir su ubicación en tiempo real con un amigo, con un familiar, y además, en caso de que desafortunadamente se presente una situación, están los botones de emergencia instalados en la aplicación que sirven para conectarse directamente con las autoridades y servicios de emergencia locales.
- Y a los conductores ¿se les pide algún tipo de exclusividad?
No es parte de la filosofía de la industria, ni tampoco de inDrive. Si pusiéramos condiciones, iría totalmente en contra de nuestra misión y de los valores que tenemos. Queremos brindar posibilidades y herramientas para la comunidad en general y eso es lo que nos ocupa.
- Hablando del equipo humano que está detrás de inDrive, ¿tienen equipos del país para cada país o es total y completamente global?
Hay equipos globales, regionales y locales, dependiendo del área y de las necesidades. Por ejemplo, hace dos años, cuando yo entré, el equipo local era mucho más pequeño respecto de cómo es hoy, donde los equipos locales son mucho más robustos. Eso nos indica, precisamente, el crecimiento que ha tenido inDrive a nivel regional. Lo cierto es que el equipo viene creciendo de manera acelerada y esas manos locales cada vez son más en los distintos países de la región.
- Ustedes antes eran InDriver y ahora son inDrive, ¿por qué han cambiado de nombre?
Ese cambio se hizo en octubre de 2022 y la principal razón es poder reflejar la evolución que hemos tenido. Te mencioné al principio cómo surgió el nombre de los independent drivers, pero en estos nueve años ha crecido bastante, se han añadido nuevas verticales de negocio en donde tenemos que poder manifestarlo de una forma más potente, más fuerte. Además, queremos que el nombre de la app también refleje no sólo las nuevas verticales sino esa misión, esos valores, esa filosofía que te he venido contando desde el principio, y manifestar la fuerza interior que en el nombre significa: inner drive, esa fuerza interior para combatir la injusticia tecnológica, para dar acceso, para democratizar el acceso a las herramientas, el trato persona a persona, el poder de elección, todo eso se ve reflejado en el nombre de inDrive.
- Justamente hablando del futuro, ¿cómo están creciendo en el continente?, ¿cuáles han sido los hitos de este año 2022 y qué planes hay para el año que viene?
2022 ha sido un año bastante desafiante, pero al mismo tiempo satisfactorio. Nos sentimos muy bien con el desarrollo que ha tenido la aplicación, ya que este año alcanzamos los 150 millones de descargas a nivel global. También cumplimos cuatro años de aniversario en varios países de la región, hemos hecho lanzamientos en más ciudades: Santiago, Buenos Aires, y hemos fortalecido Colombia y Perú, pero el foco estuvo en hacernos más fuertes en donde ya estamos.
Los planes para 2023 están, precisamente, en poder trasladar las fortalezas que de pronto hemos podido crear con la unidad de transporte dentro de ciudad, que es en donde somos más fuertes, y poder trasladar ese conocimiento y esa marca que ya se ha construido para que otras unidades de negocio puedan seguir fortaleciéndonos.
¿Crees que las economías de plataformas, la llamada economía colaborativa, son cosas que permiten una inclusión laboral y financiera a las personas?
Las plataformas permiten conectar a personas con necesidades, y a personas con personas. Conectar a alguien que esté interesado en generar algunos ingresos con una persona que necesita un servicio, independientemente de cuál es, las plataformas han llegado para brindar el espacio para que esas dos partes se comuniquen y puedan interactuar. El reto precisamente está en plataformas como nosotros, capaces de desarrollar esos modelos para que sean inclusivos y abiertos para todos, y que precisamente se construya una comunidad a partir del uso de la tecnología, de las plataformas y, en general, de las herramientas disponibles para todos.