‘Curupira’ es un innovador proyecto tecnológico desarrollado por la Universidad del Estado de Amazonas, diseñado para prevenir la deforestación en la Amazonía. Esta región es vital debido a su diversidad de fauna y flora, pero también es críticamente amenazada por actividades humanas destructivas. El proyecto se inspira en la mitología indígena, donde Curupira es un guardián de la naturaleza.
Este sistema de IA utiliza dispositivos que se asemejan a módems de internet inalámbrico pero están equipados con sensores y un programa de inteligencia artificial. Estos sensores detectan sonidos relacionados con actividades de deforestación, como motosierras o tractores. Cuando se detecta una amenaza, el sistema envía alertas en tiempo real a las autoridades, permitiendo una respuesta rápida para detener la destrucción de la selva.
El proyecto ha demostrado su eficacia en pruebas en condiciones simuladas de áreas remotas de la selva en Manaos, la capital del estado de Amazonas en Brasil. Los sensores pueden comunicarse entre sí sin necesidad de internet, lo que los hace efectivos incluso en lugares remotos.
Uno de los aspectos más prometedores es su costo, que es significativamente más bajo en comparación con otros sistemas de alerta en otros países. La fabricación de cada unidad de ‘Curupira’ cuesta entre 200 y 300 dólares y tiene una autonomía de batería de un año.
Los creadores del proyecto buscan financiamiento para fabricar e implementar entre cien y mil sensores en el campo. También planean desarrollar sensores adicionales que puedan identificar focos de incendio utilizando detectores de humo y termómetros infrarrojos.
Curupira resulta esencial en un momento en que la Amazonía enfrenta una creciente amenaza de deforestación, y el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, se ha comprometido a poner fin a la deforestación en la Amazonía para 2030, después de un aumento significativo durante el mandato de Jair Bolsonaro. Su bajo costo y capacidad de comunicación en áreas remotas lo hacen prometedor en la lucha por la preservación de este crucial ecosistema, al tiempo que destaca el potencial de la IA en futuros proyectos sociales y ambientales.